sábado, septiembre 28, 2019

PAPÁ, MAMÁ DE CARLOS GERMAN BELLI

 

PAPÁ, MAMÁ DE CARLOS GERMAN BELLI
 

PAPÁ, MAMÁ DE CARLOS GERMAN BELLI

Papá, mamá,
para que yo, Pocho y Mario
sigamos todo el tiempo en el linaje humano,
cuánto luchasteis vosotros
a pesar de los bajos salarios del Perú,
y tras de tanto tan sólo me digo:
«venid, muerte, para que yo abandone
este linaje humano,
y nunca vuelva a él,
y de entre otros linajes escoja al fin
. . . . . . una faz de risco,
. . . . . . una faz de olmo,
. . . . . . una faz de búho».

jueves, septiembre 26, 2019

Nausícaa por Marco Martos

 
Nausícaa por Marco Martos

Nausícaa por Marco Martos

Tú vienes de las arenas de Homero
y trajiste a nuestras vidas
la maravilla.
Te soñé entre el agua verde y cana
y las rocas de la playa,
cuando la aurora de rosáceos dedos
empieza a iluminar la vida de los hombres,
y así permaneces en los ojos
como la llama de la esperanza
que no cede al sufrimiento
y que crece y se multiplica
en el amor de los otros.
Verte me alegra tanto
que me quedo mudo
y te bendigo y hay agua y sal
en mi cara y arena de Homero
que se mezcla en mis papeles.

 

domingo, septiembre 22, 2019

POEMA JUEJU DE LIU YUXI (772 - 842). Dinastía Tang (618 - 907). VIENTO DE OTOÑO.

POEMA JUEJU DE LIU YUXI 

(772 - 842). Dinastía Tang (618 - 907). 

VIENTO DE OTOÑO. 

 


¿De dónde llega el viento de otoño?

Susurra al despedir a la bandada de ánsares.

En la madrugada penetra por los árboles del patio;

el solitario viajero es el primero en escucharlo. 

 

(Traducción directa del chino clásico: Wilfredo Carrizales).

sábado, septiembre 21, 2019

Charles Bukowski - Abraza la oscuridad

 
Charles Bukowski

Charles Bukowski - Abraza la oscuridad
 

La confusión es el dios la locura es el dios

la paz permanente de la vida es la paz permanente de la muerte.

La agonía puede matar o puede sustentar la vida pero la paz es siempre horrible la paz es la peor cosa caminando hablando sonriendo pareciendo ser.

no olvides las aceras, las putas, la traición, el gusano en la manzana, los bares, las cárceles los suicidios de los amantes.

aquí en Estados Unidos hemos asesinado a un presidente y a su hermano, otro presidente ha tenido que dejar el cargo.

La gente que cree en la política es como la gente que cree en dios: sorben aire con pajitas torcidas

no hay dios no hay política no hay paz no hay amor no hay control no hay planes

mantente alejado de dios permanece angustiado

deslízate.

Versión de Rafael Díaz Borbón

Manes de Chigorin por Marco Martos

 

Manes de Chigorin por Marco Martos

¡Manes de Chigorin! protéjanme
contra las jugadas diarias, avezadas artimañas
que vienen por las bandas, o se producen
en el centro de mi tablero, con sonrisas,
gambitos, empozoñados regalos,
y al final, las dagas, las pócimas embrujadas,
los venenos florentinos que Dante conoció
desde su cuna!
¡Denme paciencia, tacto, inteligencia,
prudencia y audacia, para hacer lo que debo
en cada momento, sin equivocarme!
Me zafaré Chigorin, los venceré,
te lo juro, por la diosa Caissa.
 
 

 

 

M. Yourcenar. Sources II (Gallimard, 1999)

 


"Lo mejor para las turbulencias del espíritu, es aprender. Es lo único que jamás se malogra. Puedes envejecer y temblar, anatómicamente hablando; puedes velar en las noches escuchando el desorden de tus venas, puede que te falte tu único amor y puedes perder tu dinero por causa de un monstruo; puedes ver el mundo que te rodea, devastado por locos peligrosos, o saber que tu honor es pisoteado en las cloacas de los espíritus más viles. Sólo se puede hacer una cosa en tales condiciones: aprender."

*M. Yourcenar. Sources II (Gallimard, 1999)

viernes, septiembre 20, 2019

POESÍA PERUANA INFANTIL de RICARDO GONZÁLEZ VIGIL

 
 
Antología, Poesía peruana infantil (Lima, Mascapaycha Editores, 2019) de Ricardo González Vigil

 

POESÍA PERUANA INFANTIL de RICARDO GONZÁLEZ VIGIL 

 
Antología, Poesía peruana infantil (Lima, Mascapaycha Editores, 2019) de Ricardo González Vigil
 

Antología, Poesía peruana infantil (Lima, Mascapaycha Editores, 2019) de Ricardo González Vigil
 

FÚTBOL

 A Vicente y Lorenzo
 
Juega con la tierra
Como una pelota
Báilala
Estréllala
Reviéntala
No es sino eso la tierra
Tú en el jardín
Mi guardavalla mi espantapájaros
Mi Atila mi niño
La tierra entre sus pies
Gira como nunca
Prodigiosamente bella.
 
 
POEMA FÚTBOL A VICENTE Y LORENZO POR BLANCA VARELA
POEMA FÚTBOL A VICENTE Y LORENZO POR BLANCA VARELA

 EL CIELO DIBUJA A VICENTE Y LORENZO POR BLANCA VARELA

 
El cielo dibuja dos nubes
para que piense.
El cielo crea un pájaro
para que ame.
El cielo me da la luz
de los árboles
para que hable
y me viste
casi de blanco.
El cielo dibuja un pino
un arco iris
un crepúsculo.
y, corazón
no hay nada de por medio.
Sólo este cuerpo.
Sólo esta voz.
Sólo este asombro
tan inmenso.
 
 
Poema, “El cielo dibuja” de Jorge Pimentel
Poema, “El cielo dibuja” de Jorge Pimentel

 

Poema, “A mi hermano Miguel” de nuestro poeta inmortal, César Vallejo:

 
A MI HERMANO MIGUEL
 
In Memoriam.
 
Hermano, hoy estoy en el poyo de la casa,
donde nos haces una falta sin fondo!
Me acuerdo que jugábamos esta hora, y que mamá
nos acariciaba: “Pero, hijos…”
Ahora yo me escondo,
como antes, todas estas oraciones
vespertinas, y espero que tú no des conmigo.
Por la sala, el zaguán, los corredores.
Después, te ocultas tú, y yo no doy contigo
Me acuerdo que nos hacíamos llorar,
hermano, en aquel juego.
Miguel, tú te escondiste
una noche de agosto, al alborear;
pero, en vez de ocultarte riendo, estabas triste.
Y tu gemelo corazón de esas tardes
extintas se ha aburrido de no encontrarte. Y ya
cae sombra en el alma.
Oye, hermano, no tardes
en salir. Bueno? Puede inquietarse mamá.
 
 
A MI HERMANO MIGUEL In Memoriam por César Vallejo

 

Winston Orrillo en su poema, “Mi país”:

 
MI PAÍS
 
En un libro de colores
me encontré con mi país:
era bello y noble y fuerte
como el día al despertar.
Me encontré con sus montañas
y encalé su azul altar,
y bogué yo en sus lagunas
de la mano de papá.
Me perdí yo entre sus bosques,
caminé por la ciudad,
y por todas partes todas
yo quería juguetear.
Mi país tiene la forma
que le da mi corazón
y todo esto yo lo digo
al cantarle esta canción.
 
 
Winston Orrillo en su poema, “Mi país”:
Winston Orrillo en su poema, “Mi país”:

 

Poema, “Alguna ventaja” de Sonia Luz Carrillo:

 
Mi hijo conversa con los pájaros
claramente,
con el viento,
con la yerba vespertina.
Nosotros
hace horas hablamos
sin entendernos.
 
Poema, “Alguna ventaja” de Sonia Luz Carrillo:

 

6.- VILLANCICOS Y ALMA RELIGIOSA. 

Poema “Villancico andino” de Rosa Cerna Guardia:
 
VILLANCICO ANDINO
 
Por el caminito sembrado de rosas
viene corriendo el Niño Jesús,
ábrele los brazos, corre, corre, corre,
hazle su cunita en tu corazón.
Apúrate de prisa
que por el otro camino viene Pilatos,
trayendo una cruz de madera
para el Niño Jesús.
Dile que has visto al Niño
que se iba, que se iba corriendo,
corriendo,
al otro lado del rosedal,
pasando el muro, pasando el muro
del romeral.
 
“Villancico andino” de Rosa Cerna Guardia

 

 “Adivinanza” de Javier Sologuren:

 
ADIVINANZA
 
Hablan sin tener boca,
Sin estudiar saben todo;
Tan chiquitas y cuerdas,
Tan chiquitas y locas;
Sin ellas
Será poco lo que sepas,
Será poco lo que aprendas.
(Las letras)
 
“Adivinanza” de Javier Sologuren
“Adivinanza” de Javier Sologuren

 
Antología, Poesía peruana infantil (Lima, Mascapaycha Editores, 2019) de Ricardo González Vigil

Antología, Poesía peruana infantil (Lima, Mascapaycha Editores, 2019) de Ricardo González Vigil
Antología, Poesía peruana infantil (Lima, Mascapaycha Editores, 2019) de Ricardo González Vigil

Antología, Poesía peruana infantil (Lima, Mascapaycha Editores, 2019) de Ricardo González Vigil

Antología, Poesía peruana infantil (Lima, Mascapaycha Editores, 2019) de Ricardo González Vigil

Antología, Poesía peruana infantil (Lima, Mascapaycha Editores, 2019) de Ricardo González Vigil

Antología, Poesía peruana infantil (Lima, Mascapaycha Editores, 2019) de Ricardo González Vigil

Antología, Poesía peruana infantil (Lima, Mascapaycha Editores, 2019) de Ricardo González Vigil


Días, meses, años con Ricardo Palma por Marco Martos

 
Días, meses, años con Ricardo Palma
Marco Martos

Días, meses, años con Ricardo Palma
Marco Martos
 
Ricardo Palma, es, sin duda, uno de los pocos autores de nuestra literatura que los peruanos podemos acceder con mucha familiaridad, puesto que está incorporado a los programas escolares hace muchos años. Este hecho estadístico no es necesariamente fuente de su popularidad. Probablemente la primera razón de su aceptación por todo el que lo lea es que conecta de un modo absoluto con todo tipo lector, en primer lugar con los niños. La experiencia de lectura que tenemos, la primera, es la inolvidable. De manera que leer a Palma en la escuela primaria garantiza su perdurabilidad en nuestra memoria. Ahí está aquel sacerdote realista Zapata que tenía el placer de llamar Martín a José de San Martín y al que este bautizó como Pata, mediante decreto supremo. Y ahí está el mariscal Ramón Castilla jugando con el dije que semejaba un cañoncito, intrigado sobre lo que le iba a pedir el ciudadano que se lo había regalado. 
 
Esta primera impresión definitiva se va haciendo más rica con el paso de los años, en la medida que nuestra propia vida se va haciendo más variada y compleja. Palma tiene una tradición o muchas tradiciones para todo tipo de lector. Cuando los adolescentes o los adultos jóvenes sienten la poderosa garra del amor, Palma tiene siempre una palabra amable para matizar los sufrimientos y las alegrías de ese vendaval. El lector ciudadano, interesado por asuntos del poder, tiene numerosas tradiciones que lo tratan detrás de bambalinas, no en sus fastos y grandes decisiones, sino en el día el día, en las arbitrariedades y caprichos de las conductas humanas. En las tradiciones, hay un Palma para cada uno de los lectores, y cada quien sabe qué tecla secreta de nuestros intereses toca con su pluma prodigiosa. En mi caso, siendo adolescente, la magia de su escritura comunicó con mis intereses cuando pude leer la tradición “Los incas ajedrecistas” que versa sobre las habilidades en el juego de los escaques de Atahualpa. quien aprendió de sus captores españoles a mover los trebejos. En el escrito que comentamos, Palma, una vez más, de relacionarlo todo. De manera zahorí aprendemos que en ajedrez los observadores no deben intervenir de ninguna manera en el transcurso de la partida, que deben permanecer en silencio, sin dar muestras de apoyo a uno de los antagonistas. En ajedrez no hay barras. Como dice la conseja popular, en ajedrez “los mirones son de palo”. Y aprendemos de una vez para siempre como los hechos de apariencia nimia, pueden modificar la historia. La tradición de marras, dedicada a Evaristo P. Duclós, me llevó a averiguar quién era o había sido este personaje. Pude saber que se trataba de un dentista francés, afincado en Lima, profundo aficionado al juego del ajedrez y que había sido fundador del club de ajedrez de Lima en 1874, institución que según consta en sus archivos que hoy son propiedad de la Federación Peruana de Ajedrez, hizo una ceremonia para saludar a algunos de sus miembros que se incorporaban al ejército peruano en 1879, cuando se iniciaba la guerra del Pacífico. Y era amigo cercano de Christian Dam, propulsor de las ideas anarquistas. De esta manera, a través de detalles, el mundo representado por Palma en sus tradiciones despertó mi profundo interés por la historia de mi patria. Todo lo dicho hasta aquí apunta a una conclusión inicial y es Palma siente poética la historia que está siempre presente en cada uno de sus escritos. Con todo lo que escribió en sus tradiciones, Palma se instala en la imaginación de los peruanos y es el hilo conductor de sus lectores, de cómo creemos que ha sido nuestra historia a lo largo de los siglos. La reciente publicación de una novela de Alonso Cueto sobre “La Perricholi” es muestra palpable de cómo los temas y los intereses de Palma viven en la memoria de los peruanos de hoy. Este es el Palma que conocemos la mayor parte de los peruanos, el de las tradiciones, el que cubre con sus escritos zumbones, varios siglos de nuestra historia, visión literaria de nosotros mismos que ha sido completada por escritores como Ciro Alegría, José María Arguedas, Mario Vargas Llosa y Julio Ramón Ribeyro. 
 
Tardamos bastante tiempo en descubrir que hay otro Palma, el Palma ciudadano, el interesado en la manera de gobernar el país, el Palma de las instituciones, del trabajo diario, más allá de su labor en el campo de la ficción. Y la maravilla es que relaciona todo lo que hace, con una finalidad superior, servir al país. Fue esta motivación vital la que lo llevó a fundar la Academia Peruana de la Lengua el 30 de agosto de 1887 y fue el amor al país el que lo impulsó a defender en 1892 la manera de hablar el español frente a los miembros de la Real Academia Española. Y fue ese amor al Perú, el que lo volvió enfurruñado frente a la docta institución de Madrid que actuó de manera dura frente a los reclamos americanos. Con el paso del tiempo, Palma ha triunfado en toda la línea, sus puntos de vista en materia de lenguaje, coinciden, con rara intuición, con la manera de concebir los lenguajes de las corrientes lingüísticas de hoy. Palma reclamaba y está reclamando en derecho de los hablantes a usar su lengua, tal como lo desean, lo más parecida a la de sus propios padres. Y utilizamos ahora en cada país el lenguaje español, tal como lo hemos desarrollado, con prescindencia de órdenes que vengan de otras partes. El tiempo de los provincianismos ha terminado. El meridiano del buen hablar pasa por todos los lugares. Una última imagen para recordar a Palma, el reconstructor de la Biblioteca Nacional. Las desdichas suelen acicatear a los mejores. Eso ocurrió con Palma después del despojo de libros que sufrió la Biblioteca Nacional en ocasión de la guerra del Pacífico. Pacientemente, con trabajo diario y merced a su gran prestigio, Palma levantó de sus escombros a nuestro mejor repositorio de lectura. Esa sola tarea le garantiza la eterna gratitud de todos los peruanos.

sábado, septiembre 14, 2019

HAIKU 2 : Mitsuhashi Takajo (1899-1972)

HAIKU 2 : Mitsuhashi Takajo (1899-1972)

 

Sobre un trineo sin luz

A la caída del día

En la llanura nevada


 

HAIKU 2 : Mitsuhashi Takajo (1899-1972)

 

Sobre un trineo sin luz

A la caída del día

En la llanura nevada

 


 

 

viernes, septiembre 13, 2019

LLEGARON A TIEMPO DE CHARLES BUKOWSKI

 


LLEGARON A TIEMPO
Me gusta pensar en escritores como James Joyce
Hemingway, Ambrose Bierce, Faulkner, Sherwood
Anderson, Jeffers, D. H. Lawrence, A. Huxley,
John Fante, Gorki, Turgenev, Dostoievsky, Saroyan,
Villon, incluso Sinclair Lewis, y Hamsun, incluso T. S.
Elliot y Auden, William Carlos Williams y
Stephen Spender y el valiente de Ezra Pound.
Me enseñaron tantas cosas que mis padres
nunca me enseñaron, y
también me gusta pensar en Carson McCullers
con su Café Triste y Ojo dorado.
ella me enseñó muchas cosas que mis padres
nunca supieron.
Me gustaba leer los libros de tapa dura de las bibliotecas
en su simple encuadernación de biblioteca
azul y verde y marrón y rojo claro
me gustaban los viejos bibliotecarios (varones y mujeres)
que te miraban seriamente
si tosías o te reías muy fuerte,
y aún cuando se parecían a mis padres
en realidad no había ninguna similitud.
Ahora ya no leo a estos autores que alguna vez leí
con tanto placer,
pero es bueno pensar en ellos,
y también me
gusta mirar las fotografías de Hart Crane y
Caresse Crosby en Chantilly, 1929
o las fotos de D. H. Lawrence y Frieda
asoleándose en Le Moulin, 1928.
Me gusta ver a André Malraux en su traje de aviador
con un gatito en el pecho y
me gustan las fotos de Artaud en el loquero
Picasso en la playa con sus fuertes piernas
y su cabeza pelada, y también está
D. H. Lawrence ordeñando esa vaca
y Aldous en Saltwood Castle, Kent, Agosto de
1963.
Me gusta pensar en toda esta gente
que me enseñaron tantas cosas que yo
nunca había imaginado antes.
y me enseñaron bien, muy bien
cuando eso era tan necesario
me mostraron tantas cosas
que nunca creí que fueran posibles.
todos esos amigos
bien adentro de mi sangre
quienes cuando no había ninguna oportunidad
me dieron una.
CHARLES BUKOWSKI

HOJA DE VIDA POR RICARDO GONZÁLEZ VIGIL

HOJA DE VIDA POR RICARDO GONZÁLEZ VIGIL   HOJA DE VIDA POR RICARDO GONZÁLEZ VIGIL Vida: me he pasado toda la vida leyendo, amándote a plenit...